Post-nuclear Bloody Films: The Boxer's Omen (1983)

viernes, 7 de diciembre de 2007

The Boxer's Omen (1983)

Psicodélica película que narra las andanzas de un púgil de Hong Kong que viaja a Tailandia para vengarse de un luchador de Tai boxing que ha matado a su hermano. Allí encontrará un templo taoísta que le ayudará a vencer a dicho luchador, pero también descubrirá que debe hacer frente a un maligno nigromante.

Es casi imposible no quedar sorprendido ante esta excéntrica y frenética (no da ni un solo respiro) película llena de extrañas secuencias y no sospechar que el director se haya metido algún LSD mientras la rodaba. Es verdaderamente sorprendente, en serio, la película al principio parece la típica película de lucha o de artes marciales, pero no lo es ni por asombro, ya que la película da un vuelco de 180º y mezcla gore a raudales, efectos especiales muy kitchs y la religión con el vudú y la magia negra. Regala joyas como las secuencias en las que se ven unos pequeños murciélagos-esqueletos corriendo por el templo, una secuencia en la que despellejan (si, si, estas leyendo bien) a la malvada hechicera o en la que se ve al protagonista vomitando una anguila viva por la boca (¡!) y otra en la que se le ve metido en un jarrón y poco a poco su cuerpo se le va llenando de mantras budistas (o por lo menos eso parece).

Acuñada por Pete Tombs, crítico e historiador especializado en películas exóticas básicamente de terror, "The Boxer's Omen" queda recogida en su genial e imprescindible libro: "Mondo Macabro, el cine más alucinante y extraño del planeta" (publicada por Circulo Latino en el 2003, con el apoyo del Festival de Sitges). De hecho el propio Tombs ha creado un sello (Mondo Macabro) para distribuir este tipo de películas tan extrañas como atractivas, mediante el cual se pueden encontrar joyas como "Alucarda", "Sangre de vírgenes", "Latidos de pánico", "The Devil's sword" o "Miss Muerte" de Jess Franco.

Recomendada a todos los cinéfagos (no cinéfilos) con ganas de descubrir y experimentar un cine con la capacidad de dejarte tan aturdido como boquiabierto.