Sabine recomienda... Gran Torino (2009)

Walt Kowalski (Clint Eastwood) es un tipo duro y chapado a la antigua, que tras la muerte de su mujer se queda totalmente solo. Ni siquiera sus hijos y nietos (todos ellos unos crápulas), muestran el menor respeto ante él y están dispuestos a aprovecharse de la situación lo posible. Por si fuera poco, Kowalski no ve con muy buenos ojos la llegada al barrio de una numerosa familia koreana, que se instalan justo en la casa de al lado...

Ya lo he dicho en alguna ocasión, Clint Eastwood me merece todo el respeto y admiración del mundo. Eastwood es todo un referente y una imagen a seguir. Sus películas están rodadas con un estilo y un ritmo narrativo envidiable, cosa que lamentablemente, se hecha muy de menos en estos días de pena y olvido. Para su nueva, y lamentablemente última película como actor, Eastwood nos adentra en una historia de redención y paz. Su protagonista, Kowalski, bien podría ser un retirado Harry Callahan o una versión urbanita del pistolero de Sin Perdón, que pasados los años necesita que todos sus pecados sean redimidos y logré alcanzar la paz espiritual de una vez por todas.

Al escribir esto, muchos pueden pensar que Gran Torino, puede llegar a ser una cinta algo religiosa y de hecho, en el film aparece un predicador llamado Janovich (Christopher Carley) que busca la redención de Kowalski. Pero lejos de encaminar la película hacia los senderos del Señor, Eastwood opta por una (verdadera) confesión en la entrada del sótano de su casa y ante un chavalín coreano (Bee Vang), y no en la Iglesia y ante un cura. Así que aunque tenga algunos guiños religiosos (véase la escenificación del sacrificio que se da al final de la cinta), se podría decir que Gran Torino es una notable cinta espiritual sobre la salvación del alma, adornada con una buena dosis de humor (impagable el momento en que Kowalski le enseña a "Aton-Tao" a hablar como un hombre).

Gran Torino, si bien es verdad, tiene claros altibajos y se percibe un cierto cansancio en la dirección, que bien podría ser propiciado por el esfuerzo del tio Clint al dirigir y actuar al mismo tiempo. Por otro lado, la el retrato que hace Eastwood de la familia, resulta un tanto exagerado y lleno de tópicos. Pero a pesar de todo esto, nadie debe caer en el error de pensar que nos encontramos ante un film "menor", como muchos han apuntado por ahi.

De film "menor" nada señores, ya les gustaría a muchos tener películas "menores" como esta en su filmografia. Solo quiero advertir una cosa: normalmente voy a ver las películas en V.O., pero para Gran Torino decidí ir a verla doblada. Pues bien, creo que el doblaje de la película es en algunos momentos totalmente horrendo y sonrojante. Y es que un mal doblaje puede llegar a interferir en la buena calidad de la cinta.