Un
genio en apuros. Lluís Josep Comerón, 1983.
Supongo que a estas alturas ha quedado más que claro que cómicos
españoles y películas para su lucimiento, no son compatibles. Este
caso no iba ser menos, y es que aunque nos encontremos al gran y
añorado Eugenio como absoluto protagonista, y que se cuente con un
reparto de caras conocidas (José Luis López Vázquez, Agustín
Gonzalez, Antonio Ozores, Juanjo Puigcorbé, Joan Pera, Víctor
Israel [como no]…), el resultado no puede ser más desconcertante.
Durán (Eugenio), es un padre divorciado que vive con su hija en una
especie de loft lleno de inventos estrambóticos, su loro y carteles
de películas. Mientras que su familia (que vive en el piso de
abajo) intenta hacer que Durán siente la cabeza y deje sus
aspiraciones a ser director de cine para casarse con una gorda millonaria
que está loquita por él y para que trabaje en una sucursal
bancaria, este pobre hombre se meterá en un berenjenal de tres
pares, cuando se cruce en su camino un hombre al que buscan unos
gángsters por no recuerdo que asunto de unos sellos valiosos. A raíz
de esto todo es un quiero y no puedo que no funciona ni por asomo. Quizás lo peor es el lastre de que Eugenio encarne a un personaje
tan increíblemente sosainas y que no cuente ni un solo chiste (¡¡él
lo intenta pero no le dejan!!), aunque técnicamente la película es bastante
convincente y por ahí hay algún gag que se agradece, véase el de la
esposa que le oculta a su marido que es una borracha… lástima que
lo repitan tanto que al final deja de tener gracia y te entren ganas
de echarte a la bebida a ti también.
Serie
B. Ricard Reguant, 2012.
Ricard Reguant, otrora director de “Sueca bisexual necesita
semental” y “No me toques el pito que me irrito”, vuelve a
utilizar su nombre de guerra Richard
Vogue
(pseudónimo con el cual firmó estas películas de corte erótico de
la época calificadas “S”) tras tres decenios y regresa con un
título que, después de tirarse un par de años en stand
by,
se ha estrenado en 2013 en las carteleras españolas con más pena
que gloria. El mismo Vogue (o Reguant, como quieran) aparece justo
antes de empezar la película y nos lanza un mensaje advirtiéndonos
de la calidad artística de lo que vamos a ver a continuación y nos
promete mucho sexo y violencia. No engaña, por ahí andan Marta
Simonet y Sonia Monroy luciendo palmito, y violencia, bueno…
también hay. Pero además nos promete que vamos a ver un producto
que nos retrotraerá a ese tipo de cine que se hacía en los 70 y a
la “serie B”, cosa que en parte es cierto si atendemos al
presupuesto y la temática que toca (secuestros, violaciones,
canibalismo), pero que abandona inmediatamente en la puesta en escena
y se une a la impersonalidad que actualmente inunda este tipo de
subproductos, que se atiborran de efectos de montaje para llenar la
falta de medios u ocultar otros fallos que habitualmente tienen esta clase de películas de bajo presupuesto. Sin embargo, pese a este lastre,
se puede disfrutar bastante gracias a la presencia y el buen hacer
del mítico Manuel Zarzo - encarnando para la ocasión a un
importante actor de serie B ya retirado -, y a las carnes prietas de
la Simonet y… joder, sí, de la Monroy también… Acaba de salir en DVD,
que lo sepan.
1 comentario:
La de Eugenio la imagino poco menos que infumable y de Reguant puede decirse que tiene el merito de haber rodado la primera película española clasificada S "Sin bragas y a lo loco" y la última: "No me toques el pito que me irrito" que era un auténtico despiporre.
Saludos. Borgo.
Publicar un comentario