Sabine recomienda... The Imaginarium of Dr. Parnassus

En el pasado Festival de Sitges, también se pudo ver la última película de Terry Guilliam, un director que está más que acostumbrado a que las cosas no le salgan todo lo bien que debiera. Tomen ejemplo sino de ese proyecto frustrado (que ahora parece que vuelve a estar en marcha), llamado The Man who Killed Don Quixote o la versión de Watchmen que el director estadounidense pensaba dirigir. Pues bien, su último proyecto tampoco ha estado exento de algunos problemas que a punto estubieron de parar la producción, ya que Heath Ledger murió durante el rodaje. Según Guilliam, cuando escuchó la noticia pensó que se trataba de una broma o un rumor lanzado para promocionar El Caballero Oscuro, pero lamentablemente todo resultó ser cierto. Pero lejos de venirse abajo, Guilliam, que ya había trabajado con el actor en la interesante El Secreto de los Hermanos Grimm, consiguió sacar adelante el film con la ayuda de Johnny Deep, Collin Farrell y Jude Law, todos ellos amigos del malogrado actor (1).

En El Imaginario del Dr. Parnassus, Guilliam nos cuenta la historia de un grupo de feriantes teatreros (muy al estilo de la magnífica Las Aventuras del Barón Munchausen), encabezado por un anciano inmortal llamado Dr. Parnassus (Christopher Plummer) y su encantadora y virginal hija (Lily Cole), que trasladándose de un lugar a otro promocionan un espectáculo que puede abrir las puertas a un mundo lleno de fantasía. Pero por otro lado, puede resultar que todo aquel que se inmiscuya en él caiga en las garras de un maquiavélico Diablo (el mismísimo Tom Waits). Lamentablemente (o afortunadamente), el espectáculo no tiene demasiado éxito, pero la suerte de este grupo cambia radicalmente cuando un día se topan con un tipo ahorcado (Heath Ledger) y le salvan la vida...

Samuel Hadida, productor del film, en el pasado Festival de Sitges.

Siempre he adorado la inventiva de este director y el maravilloso mundo que nos muestra a través de sus películas. Los Caballeros de la Mesa Cuadrada, (T. Guilliam & T. Jones, 1975), El Sentido de la Vida (Terry Jones, 1983), Las Aventuras del Barón de Munchausen han formado parte de mi y me han marcado (¡y de que manera!) desde mi niñez. Tampoco creo que nadie dude del ingenio y del sentido del humor (negrisimo) que encerraban sus animaciones en Monty Python Flying Circus. Vamos que siempre he sentido cierta simpatía y predilección por este director y su imaginario, siendo sus films más personales, - como Brazil (1985) o la incomprendida Tideland (2005) -, las que más me han gustado.

Uno de mis sketches preferidos.

Aunque puede que esta película no me haya atrapado como lo hicieron las anteriores, -ya bien sea por la muerte de Ledger que creo yo, debío alterar algo la trama (2), o bien por unos excelentes pero desmadrados y algo empalagosos efectos especiales que me recuerdan un poco a las últimas producciones de Tim Burton-, esta película no desmerece para nada el buen hacer de Guilliam tras la cámara y supone un punto y seguido en su estupenda carrera (algo escasa ultimamene debido a los gafes).

No se la pierdan niños y niñas (mayores) del mundo, que se estrana hoy.

(1) Todos estos entregaron el dinero que cobraron por sus papeles a la hija de Ledger. Todo un detalle, la verdad.

(2) Aunque a mi no me acabó de convencer del todo el hecho que el personaje de Ledger cambiara de apariencia (aunque lo encuentro muy loable, ojo), según las propias palabras de Guilliam, la lamentable muerte de Ledger hizo que la película resultara mejor.