martes, 4 de agosto de 2009

Arrástrame al Infierno (2009)


La película nos relata las desventuras de Christine Brown (Alison Lohman), una joven que para conseguir un cargo más elevado en la sucursal bancaria donde trabaja, decide negar una ayuda a una vieja gitana con más mala hostia que un hooligan con almorranas (Lorna Raver). De este modo pretende demostrar que tiene la suficiente sangre fría como para ser la nueva vicepresidenta del Banco, pero lo que no sabe es que será víctima de una terrible maldición en la que un espíritu maligno denominado Lamia, intentará acabar con su vida...


Con esta simple premisa, Sam Raimi se ha metido en el bote a millones de fans que, al igual que yo, pensaban que jamás volvería a ser el que era. Su carrera dio un vuelco inesperado cuando en 1998 dirigió esa obra maestra llamada Un Plan Sencillo, para después pasar a dirigir algunos proyectos inferiores como Entre el amor y el juego (película que no me he atrevido a ver) o la interesante Premonición, que mostraban a un Raimi totalmente diferente y sin los habituales excesos visuales a los que nos tenía tan acostumbrados y que tanto nos gustaban. Aparte algunas declaraciones de él ponían los pelos de punta y hacían sospechar que jamás volvería al terreno que tanto éxito le había dado: "hubiera preferido dirigir Ciudadano Kane a Posesión Infernal", llegó a decir en una ocasión. Pero después, los grandes Estudios le contrataron para llevar las aventuras del hombre araña a la gran pantalla, obteniendo un enorme éxito de crítica y público. Se podría decir que esta trilogía arácnida supondría un compendio perfecto entre "la marca Raimi" y el mainstream puro y duro. Pero tras dos primeras entregas bastante memorables (la segunda parte, una auténtica obra maestra), Raimi se enredó en una telaraña de fx infográficos y de subtramas para una tercera parte que resultó totalmente fallida. ¿Que le había pasado a Raimi? ¿Se había convertido en un nuevo ejemplo de como la Industria termina con la inventiva de los directores para hacer trabajos más simples y "cómodos"? Pues, gracias a Dios, nada de esto ha pasado y el tío Sam vuelve a hacer de las suyas (pero de las suyas de verdad) con este film que cuenta con guión propio junto a su hermano Ivan Raimi y con un presupuesto mucho más modesto en comparación con las cantidades que barajaba este señor ultimamente. ¡Aleluya!


En Arrastrame al Infierno, Raimi hace gala de su habitual humor negro y su estilo cartoon sanguinolento con pequeños guiños que evocan al inicio de su filmografía. De ese modo seremos testigos de ojos que salen de sus órbitas y que van a parar a la boca de la protagonista, litros de sangre y otros fluidos corporales derramados por doquier y cuerpos poseídos que flotan en el aire (véase Posesión Infernal, Terrorificamente Muertos y El Ejercito de las Tinieblas). Pero por si pudiera parecer poco, en Arrastrame al Infierno tenemos a la gitana más cabrona e hija de puta de la historia del cine y que encarna con gran tino (Lorna Raver). Si señores, esta gitana no da ni un solo respiro a la protagonista ni tan siquiera después de muerta. Pocas veces se había visto tal nivel de locura y odio en la gran pantalla, sobretodo en ese primer asalto en el parking que me parece SOBERVIO. De verdad, si no fuera por esta zingara hiper-violenta, nada sería igual. ¡Esta anciana es el punto fuerte del film!


En el reparto nos encontramos a la joven Alison Lohman, - actriz vista en films como Big Fish (Tim Burton, 2003) o Delirious (Tom Di Cillo, 2006) -, encarnando a la atormentada Christine; a Justin Long, - visto en films como Jeeper Creepers (Victor Salva, 2001) o la reciente ¿Hacemos una porno? (Kevin Smith, 2009) - , encarnado al novio de esta; a Dileep Rao, - actor televisivo que debuta con este film y que dentro de poco veremos en el nuevo y esperado proyecto de James Cameron, Avatar - , encarnando al medium Rham Jas; o a David Paymer, - actor que aparecía en films como Howard, el pato (Willard Huyck, 1986) y Quiz Show (Robert Redford, 1994) -, en el papel de gerente, son algunos de los actores que dan forma a este cuento de terror en el que la avaricia y el dinero juegan un papel muy importante. Y es que, de alguna manera, el dinero y la ambición están presentes a lo largo de todo el film: el ya comentado intento de Christine por conseguir un puesto más destacado en su trabajo, la perdida de la vivienda de la gitana y la negación del banco a ayudarla, el pequeño rifirrafe familiar con los adinerados padres de su novio, o los dos mediums, que acceden ha ayudar a Christine, no sin antes cobrar sus honorarios... Algo muy acertado para los tiempos de crisis que corren y por lo incierto que parece nuestro futuro. ¿Nos arrastrarán al Infierno a nosotros también?

Título original: Drag Me to Hell (USA, 2009)
Director: Sam Raimi
Guión: Sam & Ivan Raimi
Actores: Alison Lohman, Lorna Raver, Justin Long...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hey you¡, haber, de verdad te parece fallida la 3º parte de spidermen? bueno, no es mala del todo..
..arrátrame ya se ha convertido en mi favorita del verano, sin duda, ya estoy deseando verla otra vez y pienso que el tito sam lo unico que sabe hacer bien en esta vida son obras de esta calaña, con excepción de un plan sencillo, , que cuando la vi por 1º vez no le di ni importancia, y ahora ya más adulto me parece un clasico como "Encrucijada de horror", LA OSTIA QUE ABURIMIENTO EN LA OFICINA, estoy yo solo y los mosquitos...¡ bueno j.p, ESTE VA A SER MI ULTIMO ESCRITO VERANIEGO en este puto blog primo, yo la semana que viene pondre mis ultimas reseñas y colgare las botas hasta mediados de setiembre, por lo del chiquillo y tal, bueno, espero que en la vuelta al cole hagas los deberes y me pases las tomas falsas y material inedito de "El dr.pontius", venga pixa,
DONY CASTRO

MarioBava dijo...

Para mi horrible...Pobre Raimi como esta terminando...