lunes, 22 de septiembre de 2008

Sabine recomienda... Madmen of Mandoras (1963)


Un doctor (John Holland) descubre el antídoto para un mortífero gas y es raptado por unos misteriosos hombres. Kathy (Audrey Care), su hija, le seguirá la pista junto a Phil (Walter Stocker), su marido, hasta llegar a una isla caribeña llamada Mandoras. Una vez allí serán raptados y encarcelados por un grupo de nazis que viven recluidos en una especie de bunker y que reciben ordenes de la cabeza (si habéis leído bien), la cabeza de Adolf Hitler (Bill Freed).

Madmen of Mandora podría ser sin lugar a dudas una de las peores películas que he podido ver durante mi vida, pero que sin embargo (como siempre me suele pasar con este tipo de películas), me pareció divertidisima (y aparte las hay con mayor presupuesto y muchisimo peor que esta). La historia en si es bastante simple, por lo que encuentro bastante inutil la cantidad de giros que hay durante la película con tal de sorprendernos. Mas que sorprendernos, no hacen otra cosa que confundirnos: uno que es malo de repente resulta ser bueno; uno que era bueno luego resulta ser malo; uno que les ayuda resulta ser el hijo de uno de los buenos que antes era malo (me estoy liando)... Bueno, la película en sí es bastante tonta, pero me veo en la más absoluta obligación de recomendarla a todos los lectores de este blog por la increíble fotografía de Stanley Cortez, director de fotografía de películas tan GRANDES como Una luz en el hampa, La noche del cazador o Secreto tras la puerta... ¿Otras razones? ¿Porque te ríes viéndola?

La verdad, es que a la hora de publicar esta reseña, no sabía muy bien como etiquetar la película, no sabía si etiquetarla como Gatillazos o como Sabine recomienda... Madmen of Mandoras no tiene nada aparte de lo ya destacado. Ni si quiera su extravagante idea resulta original ya que está claramente influenciada por The Brain that wouldn't die (1962), una película infinitamente mejor. Pero tras varias meditaciones conmigo mismo he decidido recomendarla, porque a pesar que la película es más pesada que una vaca en brazos y que le sobran unos 20 minutos por lo menos (dura unos escasos setenta y pico minutos)... Por alguna extraña razón no he podido quitarmela de la cabeza. No paro de acordarme de Bill Freed haciendo de Hitler en algunas escenas, y a la vez no paro de acordarme de la replica de su rostro (bastante conseguida por eso), que aparece en otras tantas. (Algunas obviamente necesarias, como cuando una granada alcanza el coche donde se encuentra el cerebro de Hitler y se quema poco a poco). Y es que parándote a pensar bien sobre la película, Madmen of Mandoras hace que no pares de hacerte preguntas existenciales durante su visionado. Preguntas tan elementales sobre nuestra existencia, como: ¿que cojones hago yo aquí sentado en el sofá, viendo está película? Merece la pena, porque en cierta manera te hace abrir los ojos: te hace darte cuenta que estás perdiendo el tiempo. Pero al menos es sincera y no te engaña.


Por si esto fuera poco, años más tarde se rodaron unas escenas adicionales para TV y las unieron a las ya rodadas en 1963. Si Madmen of Mandoras ya era extraña de por sí, They Saved the Hitler's Brain (titulo de esta nueva vuelta de tuerca) resulta cuanto menos algo extravagante y sin sentido. Las escenas rodadas para TV y las de la película (no olvidemos, con la increíble fotografía de Cortez), poco tienen que ver en común (no pegan ni con cola), y resulta impagable ver como estas escenas adicionales no nos llevan a nada. Absolutamente nada. Simplemente insertan una pequeña historia de dos detectives que siguen la pista del Científico que descubre el antidoto para el gas, para matarlos a los 20 minutos e inflar el metraje de la película y hacerla más insoportable de lo que es. Lo siento si me he pasado...
Bromas aparte, la película al menos es interesante por la estrafalaria manera que David Bradley (el director), cuenta la película. ¿Acaso creéis que vosotros lo hubierais hecho mejor?
Voy a probar yo mismo:

Reconstructing... Madmen of Mandoras (nueva seccion)


3 comentarios:

sangreybesos dijo...

Ninguna película donde salga la cabeza cercenada de alguien hablando y dando órdenas puede ser tan mala...

Aunque su remake se me antoja más disfrutable (a mí es que donde haya una línea de díalogo que diga Slurp Slurp...)

El Abuelito dijo...

Le dejo, señor, que me voy a ver esta peli que me la acaba de traer la mula!

Anónimo dijo...

Representa que al final Hitler se pone cachondo y se quema él mismo de la propia temperatura que coge.
Es muy original...
¿Tú donde has estudiado chaval?
¡Jamás llevaré a mis hijos a ese colegio!