lunes, 20 de febrero de 2012

SCOTT SPIEGEL: CINEASTA ENTRE CLANES


Scott Spiegel (24/12/1957, Walnut Lake, Michigan), director de la tercer y (por el momento) última entrega de la saga “Hostel” - estrenada directamente en formato doméstico -, era con apenas veinte años todo un veterano realizador de cortometrajes en Súper 8. De forma habitual, su nombre suele ir ligado a dos de los directores más influyentes de los últimos años, Sam Raimi y Quentin Tarantino, pero además ha colaborado con William Lustig, Boaz Yakin, Eli Roth y el mismísimo Clint Eastwood. A pesar de ello, su escasa filmografía se ve limitada a producciones de bajísimo presupuesto con un plan de rodaje mínimo, en las que, aún así, ha desarrollado un estilo visual único, sacando todo el partido posible a los pocos medios que tiene y, en el caso de las secuelas que ha rodado, otorgándoles una identidad propia. Este artículo intenta ser una aproximación a su carrera con el objetivo de reivindicar su figura, casi siempre incomprendida y vilipendiada por muchos.

 -Inicios (en el clan Raimi)

Los primeros cortos amateurs rodados en Súper 8 de Scott Spiegel mostraban una predilección especial por el humor y el slapstick. La mayoría de sus trabajos eran como un pequeño homenaje a los Tres Chiflados (The Three Stooges), llegando incluso a recrear paso por paso los gags contenidos en los films protagonizados por este trío. Pero en ellos también había cabida para los monstruos clásicos del cine de terror, los mad doctors e incluso para espías. Con apenas doce años realizó su primer corto en Súper 8, Inspector Klutz Saves the Day (1969), y ya en el instituto comenzó a conocer a varias personas con las que rápidamente entablaría una estrecha relación de amistad. Tal es el caso de Josh Becker, John Cameron, Matt Taylor, Bill Ward, Tim Quill, Mike Ditz, Sam Raimi o Bruce Campbell, con quienes formó la productora Metropolitan Film Group, iniciando una frenética filmografía llena de cortos (normalmente humorísticos), en los que se irían intercambiando las diferentes funciones técnicas y/o artísticas. Todos estos trabajos servirían de bagaje para sus respectivas carreras en un futuro, pues ya sea de un modo rudimentario, la mayor parte de ellos habían hecho de directores, de guionistas, de técnicos de sonido, de actores o simplemente de montadores, entre otras cosas… A Bruce Campbell, por ejemplo, que venía de realizar papeles más serios, le ayudaría a desarrollar su bis cómica, iniciándolo en el universo de los Tres Chiflados. Este hecho favorecería en gran medida la carrera del protagonista de “El ejército de las tinieblas”, cuya seña de identidad en el futuro se encontraría en sus gestos y muecas.
Los Tres Chiflados.
Junto a Sam Raimi aparcó esos “remakes” de los Tres Chiflados y realizó junto a él algunos cortos más originales como The James R. Hoffa Story, The James R. Hoffa Story, Part II o Charlie’s Angels. Pero a finales de los setenta algo cambiaría definitivamente en el grupo con la llegada de Robert G. Tapert. Con Tapert como productor y Sam Raimi de director,  los de la Metropolitan comenzarían a desarrollar proyectos más ambiciosos y de un cariz más comercial, con títulos tales como The happy Valley Kid, Clockwork, It’s Murder! o la emblemática Within the Woods, trabajo que serviría como carta de presentación a la que más tarde se convertiría en la película de terror de culto de los ochenta por excelencia, “Posesión Infernal” (The Evil Dead, Sam Raimi, 1981). Spiegel intentaría hacer con Night Crew algo parecido a lo que su amigo había hecho con Within the Woods, es decir, mostrar un corto para captar financiación y así convertir su pequeño proyecto en un largometraje de terror. Sin embargo, el destino quiso que el único rollo que tenía lo perdiera en 1980 (si bien, terminaría consiguiendo que su film viera la luz algunos años más tarde).


Debido a otros compromisos, Scott Spiegel no pudo volver a encarnar en “Posesión Infernal” el mismo rol que había interpretado en Within the Woods, pero si que echó un cable en algunas de las ideas del film y en la post producción. Donde si que tendría la oportunidad de colaborar de una forma más activa fue en Stryker’s War, también conocida como Thou Shalt Not Kill… Except (1985), el salto al largo de Becker (1), en el que Spiegel intervendría como co-guionista, además de productor de la cinta. Ese mismo año echaría una mano a Sam Raimi (y por ende a los hermanos Coen, co-guionistas del film) a la hora de desarrollar algunos de los gags de “Ola de crímenes, ola de risas” (Crimewave a.k.a. The XYZ Murders, Sam Raimi, 1985), una comedia desternillante, llena de humor slapstick y “cartoonesco”, que lamentablemente desembocó en un rotundo fracaso de crítica y público. La carrera de Raimi se encontraba por tanto en grave peligro, pero gracias al mismísimo Stephen King - quien recomendó a Dino De Laurentiis que le produjera una secuela de “Posesión Infernal”, uno de los films favoritos del escritor norteamericano -, obtuvo la oportunidad de revisionar su ópera prima, para lo que contaría con la ayuda de Scott Spiegel. Seguramente, fue él quien otorgó a “Terroríficamente muertos” esa extraña pero muy influyente mezcla de horror y humor en el que, de nuevo, se dejaba ver la sombra de los Tres Chiflados y Chuck Jones. De ese modo, en la escena en la que Ash (Bruce Campbell) jugaba al gato y al ratón al más puro estilo Tom y Jerry con su mano amputada, eran reutilizadas muchas de las ideas sacadas de uno de los cortos en Súper 8 de Spiegel. Concretamente The Attack of the Helping Hand (1979), donde una ama de casa se las tenía que ver con un guante de cocina y en el que, no por menos, aparecía brevemente Sam Raimi haciendo de lechero.

“Terroríficamente muertos” obtuvo una gran acogida por parte de los amantes del género, aunque a muchos esa mezcolanza de terror y humor les dejó algo descolocados, rasgo este que Raimi ya no abandonaría a lo largo de su carrera, salvo en muy contadas ocasiones.

-“Intruso en la noche” (1989)
El salto al largo de Scott Spiegel, tal y como apuntábamos anteriormente, ocurriría unos años más tarde, y sería con un original slasher de bajísimo presupuesto ambientado únicamente en un supermercado, y cuyo título es “Intruso en la noche” (Intruder, Scott Spiegel, 1989). Para la ocasión se nos presentaba a Jennifer (Elizabeth Cox), una cajera del súper que tenía que trabajar junto a sus compañeros durante toda la noche para cambiar los precios de todos los productos pues, al parecer, los dueños del negocio tenían pensado cerrar definitivamente las instalaciones. Por si fuera poco, la pobre Jennifer recibía la inesperada visita de un antiguo novio que después de pasar unos cuantos años en prisión volvía para declararle su amor eterno. Ante el rechazo de ésta y muy lejos de darse por vencido, el ex novio decidía merodear como un perro rabioso por las instalaciones del súper mercado, mientras que al mismo tiempo se iban sucediendo unos terribles asesinatos.

A pesar de esta premisa más bien simplona, el bueno de Spiegel adornaba la trama con toda una gama de planos imposibles consistentes en colocar la cámara en los lugares más inverosímiles como, por ejemplo, el interior de un teléfono o el mismísimo suelo. Amante de los cómics como es, Spiegel logra un tono perfecto entre humor y horror, y los asesinatos son resueltos aunando elementos cartoonescos y exagerados con el gore más contundente. No por menos, los encargados de los efectos especiales son Howard Berger, Robert Kurtzman, Greg Nicotero – que ya habían participado en “Terroríficamente muertos” -, así como Sean Rodgers, que debutaba en este film. De ese modo, podemos ver muertes tan desternillantes como impactantes: a una de las víctimas le atraviesan el estómago con un cuchillo, reventando unas latas de cerveza que se encuentran detrás de ella, mientras que a otra le clavan un gancho para la carne en la cara y lo dejándolo colgado en homenaje a “La matanza de Texas”… Este último era Sam Raimi…

El resultado es una pequeña joya totalmente aprovechable que quizás flaquee por su torpe intriga, ya que cualquier espectador con un mínimo de atención se percatará de quién es el verdadero asesino a media película. Aún así, Spiegel factura una cinta de terror muy entretenida que busca innovar el género moviendo algunas de las piezas de las que suele ir acompañadas el slasher:

- La chica acosada por su ex novio está enamorada de un apuesto compañero de trabajo (Billy Marti). Parece que entre ellos puede nacer una relación de amor en cualquier momento; sin embargo, éste, precisamente este personaje, es el que recibirá una de las muertes más brutales (y recordadas) del film, al serle seccionada media cara con una cortadora de carne.
- El acosador se convierte en el único personaje capaz de salvar a la chica y ese amor que en un principio nos parecía enfermizo, termina siendo el único real y verdadero.
- Nuestros protagonistas logran terminar con el asesino, como es lógico, pero lejos de ver el (más o menos) típico happy end antes de los créditos finales, el psicópata realiza una última pirueta maliciosa y su último aliento lo gasta en inculpar a nuestros protagonistas a la llegada de la policía (el productor Lawrence Bender y Bruce Campbell).

Estos tres puntos dan fe de que Spiegel quería desmarcarse del resto de subproductos de terror que durante los ochenta se realizaron con cuatro duros. Pero además, al igual que Carpenter hiciera en la canónica “La noche de Halloween” (Halloween, John Carpenter, 1978), no perdió la ocasión para maquillar su cinta de horror con pequeños homenajes tanto a los clásicos de Hitchcock como a títulos más cercanos pero no por menos significativos, caso de la referida “La matanza de Texas” (The Chainsaw Texas Massacre, Tobe Hopper, 1974), todo ello acompañado por una puesta en escena que bebe directamente de la cultura pop de los dibujos animados y los TBOs.

Pero a pesar de los hallazgos que pudiera tener o de lo prometedora que parecía, “Intruso en la noche” se perdió en la basta gama de películas directas a video que se estrenaban en la época. Quizás si se hubiera realizado unos años antes, a principios de los ochenta, al igual que “Posesión Infernal”, hubiera resultado más original y se hubieran apreciado más sus innegables hallazgos, pero su estreno a finales de los ochenta, cuando el género del slasher estaba casi agotado, impidió un éxito rotundo. Por consiguiente, si aquel rollo de Night Crew (el germen de esta película) no se hubiera perdido y Spiegel hubiera encontrado financiación, seguramente “Intruso en la noche” estaría a día de hoy vista de forma distinta. La modesta factura de la película y su falta de pretensiones propiciarían que su carrera pudiera despegar del todo.

-Interludios (en el clan Tarantino)
Tras esto, Sam Raimi le pidió a Scott Spiegel que trabajara junto a él en el guión de “El ejército de las Tinieblas”. Sin embargo, éste no pudo repetir la experiencia vivida con “Terroríficamente muertos” al encontrarse inmerso en el guión de “El principiante” (The Rookie, 1990), de nada menos que Clint Eastwood, escrito junto a otro buen amigo suyo, Boaz Yakin. Lamentablemente “El principiante”, un film que serviría a Eastwood para demostrar a los estudios que era un director solvente (se estrenaba el mismo año que otro film más personal y poco comercial, “Cazador blanco, corazón negro” [White hunter, black heart, 1990]), no fue muy bien recibido por la crítica que la vio como una película menor del realizador de “Sin Perdón”, considerándola una cinta de acción más en la línea de la saga iniciada por “Harry, el sucio” (Dirty Harry, Don Siegel, 1971). “El principiante”, que en un principio iba a estar dirigida por Craig R. Baxley, - realizador de la notable “Acción Jackson” (Action Jackson, 1988) -, sería a pesar de todo una encomiable buddy movie repleta de excesos y frases lapidarias, no tardando en convertirse en la película más desmadrada de Clint Eastwood, conteniendo algunas de las escenas de acción más espectaculares de su carrera.
Justo después, la carrera de Spiegel sólo logra avanzar apareciendo en diferentes caméos en películas de su amigo Raimi, o con la reescritura del guión de “De profesión asesino” (Hit List, William Lustig, 1989) aunque fuera sin acreditar. Su nombre tampoco aparecería en los títulos de crédito de la comedia The Nutt House (A.k.a. The Nutty Nut, Adam Rifkin, 1992), ya que, aunque en un principio iba a ser él mismo el que la llevase a la gran pantalla, fue sustituido en última instancia por Adam Rifkin, que no es que hiciera un mal trabajo, simplemente no era el director adecuado para dirigir esta película. Si uno ve The Nutty Nut, no tarda mucho en percatarse que el que la ha realizado poco entendía del universo slapstick y de los dibujos animados, ya que ni siquiera es capaz de sacar partido del potencial de dos genios como Robert Kurtzman y Greg Nicotero, que gracias a su magia dieron forma a un sin fin de momentos que son puro cartoon. ¿Y qué decir del protagonista de la cinta, Stephen Kearney? No arranca una sola carcajada a pesar de esmerarse en una colección de muecas de lo más extravagantes. Por no hablar de esa música disco (¡!) que escuchamos de fondo durante gran parte del metraje… Como consecuencia, ni él ni ninguno de sus amigos que estaban involucrados en tareas de guión – entre ellos Bruce Campbell, Sam e Ivan Raimi -, quisieron verse mezclados en el proyecto, por lo que ocultaron sus nombres bajo pseudónimos... ¡Y eso que salía Traci Lords! Para quitarse la espinita de esta amarga experiencia, años más tarde Spiegel aparecería como actor junto a Ivan Raimi (acreditado como Alan Smithee Jr.) en la cinta de tetas y coños, Nude Bowling Party (J. L. Williams, 1995), donde se pasaba todo el metraje haciendo fotos a unas chicas que, para eso de estar más cómodas, se iban quitando la ropa mientras jugaban a los bolos.

Los años pasarían pues, con más pena que gloria para este cineasta, aunque a principios de los noventa haría algo realmente relevante para el devenir de otro joven director, Quentin Tarantino. Para muchos, el nombre de Scott Spiegel únicamente les sonará porque fue la persona que presentó a Lawrence Bender a Quentin Tarantino (2), propiciando que este último pudiese realizar su ópera prima, “Reservoir Dogs” (1992), que no por casualidad  tenía algunos puntos en común con “Intruso en la noche”. Y no sólo porque “Reservoir Dogs” se recrease prácticamente en un almacén (3), sino porque Tarantino cogía prestada la manera de planificar una conversación que se podía ver en Intruder y la utilizaba en una de las escenas de su película. Precisamente una muy celebrada, la escena del bar en la que se da el diálogo de las propinas y el monólogo de Tarantino sobre Madonna y su Like a Virgin. Si comparamos ambas escenas, comprobaremos que están rodadas de manera muy similar – la cámara se desplaza lateralmente por los cogotes de los actores de un lado a otro de la mesa -, aunque claro está, el lenguaje afilado e ingenioso que utiliza el director de “Pulp Fiction” en esta escena no tiene ni punto de comparación con los diálogos simplones (incluyendo algún chiste malo) que se dan en la cinta de Spiegel.

Una vez más, Spiegel quedó a la sombra de un amigo suyo y su carrera, repetimos, llena de puntos muy interesantes y hallazgos, permanecía casi olvidada. Y así pasaron varios años, sumido en diversas tareas poco relevantes, hasta encontrar otra oportunidad, pero antes aún haría otra cosa por su nuevo amigo: pasarle una idea que Robert Kurtzman tenía en mente sobre una cinta de terror y robos, para que la plasmara en un guión. Aquello se convertiría en “Abierto hasta el amanecer” (From Dusk Till Dawn, Robert Rodríguez, 1996).

- “Abierto hasta el amanecer 2: Texas Blood Money” (1999)

Por los motivos ya apuntados, seguramente la persona que más relevancia tuvo en los inicios de la carrera de Quentin Tarantino sea Spiegel. Como muestra de agradecimiento, éste le devolvió el favor ofreciéndole escribir y dirigir una secuela de “Abierto hasta el amanecer”. “Abierto hasta el amanecer 2: Texas Blood Money” (From Dusk Till Dawn 2: Texas Blood Money, Scott Spiegel, 1999), fue una película directa a video (4) que recibió un aluvión de comentarios negativos por parte de la crítica (especializada o no) y, además, por gran parte de los fans de la primera parte.

Aunque en un principio la intención de Spiegel era contar una historia paralela que tuviera que ver con los acontecimientos vividos por los hermanos Gecko (interpretados en el original por George Clooney y el propio Tarantino), la trama finalmente se desviaba a la perpetración de un robo a un banco. Así pues, aparte de la breve aparición del antro vampírico llamado “La teta enroscada” y, por tanto, del inconfundible Danny Trejo, la acción pasa a desarrollarse en decorados mucho más modestos: un motel llamado “Coyote” y el banco donde sucede el robo. Y es que si algo hay que tener en cuenta a la hora de ver “Abierto hasta el amanecer 2” es que a pesar de ser una secuela de una película de éxito, tenía un presupuesto muchísimo más inferior al de su predecesora.

A la hora de preparar el guión volvió a reunirse con Boaz Yakin y por mediación de Tarantino, con Duane Whitaker, actor que ya intervino en “Pulp Fiction” (Quentin Tarantino, 1994). Este último se unió al proyecto porque tanto Tarantino como Spiegel sentían especial predilección por una cinta que éste protagonizó y escribió, Stripteaser (Dan Golden, 1995). Para la película también contó con la participación de un viejo amigo, Bruce Campbell, que junto a Tiffani-Amber Thiessen, aparecerían brevemente en el prólogo.

Una vez más, Spiegel da rienda suelta a su característica manera de planificar las escenas, introduciendo la cámara en cientos de sitios. Detrás de un ventilador, dentro de las fauces de un vampiro, o del recipiente donde bebe un perro, cualquier sitio parece bueno para este director. Por si fuera poco, tampoco escatima en hacer unos explícitos homenajes a Hitchcock o Peckinpah, cosa que, al parecer, una película de serie B no se puede atrever a hacer. Y es que resulta curioso ver la cantidad de litros de baba por segundo que sueltan algunos críticos y espectadores mientras contemplan “Abierto hasta el amanecer” o los homenajes al Grindhouse dirigidos por Tarantino y Rodríguez y, sin embargo, no entienden una genuina cinta de Serie B cuando la tienen delante. Son los misterios del cine.

A pesar de haberle dado una personalidad propia a la película, alejándose todo lo que pudo de la primera parte, el segundo intento de Spiegel en el largo no terminó siendo del todo satisfactorio, aunque según dicen, fue la película favorita de Bob Wenstein de todas las producidas aquel año por la Dimension Films.

- “Mi nombre es Modesty: una aventura de Modesty Blaise” (2004)
Pues si, los Wenstein debieron quedar muy impresionados por la película de Scott Spiegel, sobretodo porque no volvieron a acordarse de él hasta pasados cinco años (5). Ese proyecto sería el intento de realizar una adaptación fidedigna del personaje creado por Peter O’Donell, Modesty Blaise, que ya fuera llevado a la gran pantalla sin demasiado éxito por Joseph Losey en 1966 con Monica Vitti de protagonista (“Modesty Blaise, superagente femenina”) (6) y más tarde, en 1982, diera pie a un fallido intento de crear una serie televisiva, en la que Ann Turkel encarnaba a la heroína. 

Para colmo, el director de “Intruso en la noche” fue contratado por los pelos, y cuando apenas quedaba una semana para el rodaje tuvo que trasladarse a Bucarest en substitución de Ted Nicolau que, de la noche a la mañana y sin ningún motivo aparente, pasó a convertirse en el productor de la cinta. De ese modo, Spiegel tuvo que hacer frente a esta modesta producción – que en teoría era el inicio de una nueva franquicia -, en un país extranjero, sin saber apenas nada del personaje y con tan solo 18 días de rodaje. 
Peter O'Donell
La película, puede que la más floja de su filmografía, vuelve a desarrollarse ampliamente en un único escenario, en este caso un casino, cosa que al director le hacía pensar en Rock All Night (1957), obra de otro malabarista que sabía desenvolverse con soltura en  presupuestos bajos y pocos escenarios, el maestro Roger Corman. A pesar de flaquear en algunos puntos del metraje (sobretodo aquellos pasajes que explican la infancia de Modesty), así como en el montaje (con torpes cámaras rápidas y algo videocliperas), Scott Spiegel logró sacar adelante un proyecto predestinado al fracaso, consiguiendo una decente cinta de acción e intriga sin demasiada pirotecnia pero entretenida, que ya es mucho.

Aún así, su estética de telefilm y la poca pericia de algunas de las escenas de acción - sobretodo las peleas cuerpo a cuerpo -, echaban por tierra cualquier acierto que la película pudiera tener. Y es que, tal y como hemos apuntado, la película se realizó en tan sólo 18 días y eso incluía ensayos. Así que, cuando vemos a Modesty Blaise  emulando ser una experta en artes marciales, habría que tener presente el ridículo lapso de tiempo que tuvo para prepararse la actriz encargada de darla vida, Alexandra Staden.
Travolta leía una de las novelas de Modesty Blaise mientras cagaba en "Pulp Fiction".
Lógicamente, además de la valentía de Spiegel a la hora de sacar adelante este proyecto suicida, también habría que señalar la profesionalidad de todos los técnicos que intervinieron en la producción que, según las propias palabras del realizador, “hicieron un trabajo fabuloso”. Sea como fuese, lo que es seguro es que aquella película no parecía ser el inicio de ninguna franquicia, por lo que el personaje de Modesty Blaise volvió a las viñetas en la espera de que alguien vuelva a rescatarla para la gran pantalla.

- Raw Nerve  /  “Hostel 3: de vuelta al horror” (2011) / “Spring Break’ 83”

En el 2003, junto a Eli Roth y Boaz Yakin, Spiegel forma la productora Raw Nerve. Con ella tienen pensado producir películas de horror extremas y de bajo presupuesto. Aunque en un primer caso, este trío se iba a encargar de producir pequeñas películas dirigidas por otros - como sucedería con el simpático remake de la emblemática “2000 maniacos” de Herschell Gordon Lewis, titulada para la ocasión como “2001 maniacos” (Tim Sullivan, 2005) -, de allí nacieron las dos partes de la “explícita” “Hostel” dirigidas por Eli Roth. Como vemos, en un principio Raw Nerve parece tener una clara predilección por ese “invento” llamado torture porn iniciado por James Wan y su “Saw” (2004) (aunque ya existían filmes seminales como The Wizard of Gore, Sardu [aka. The incredible Torture Show] o, sin ir más lejos, las Guinea Pig), aunque al menos en las dos primeras entregas de “Hostel” también habría cabida para algo de erotismo de lo más gratificante.
Sin embargo, en esta tercera parte directa a DVD y sin Eli Roth detrás (ni la productora Raw Nerve), se opta por un camino mucho más comedido y más cercano incluso al thriller que a la casquería que vimos en las dos entregas anteriores. El erotismo también está bastante cercenado y aunque durante el metraje vemos algo de carne, la mayor parte de ella está debidamente tapada. Este “Hostel 3: de vuelta al horror” dirigido por Spiegel, rompe por lo tanto con bastantes puntos establecidos por sus predecesoras, ya que aquí la intriga y la acción substituye al gore que, aunque algo se deja ver, no causa el menor impacto.

La trama parece sacada directamente de la exitosa “Resacón en las Vegas” (The Hangover, Todd Phillips, 2009), pero se dirige indiscriminadamente al turbio mundo del snuff y las apuestas, presentándonos a una red de millonarios sin escrúpulos que apuestan sobre el modo en que van a morir las víctimas, mientras presencian los crímenes en directo. Otra de las grandes bazas de “Hostel 3” es que juega continuamente con la ambigüedad de los personajes. De hecho, al inicio de la película, creemos presenciar otra película más sobre mochileros perdidos en países del Este para, rápidamente, comprobar que estamos en pleno E. E. U. U., concretamente en la ciudad de Las Vegas. Es de agradecer pues, esa continúa búsqueda de giros inesperados y dejar claro que, al menos, en lo que respecta a esta entrega, nada parecerá ser lo que es, llegando a un solvente y sorpresivo final.

Spiegel, que en esta ocasión también se encarga de producir, vuelve a los bajos presupuestos y a un calendario de rodaje de lo más ajustado: tan sólo 20 días. Así que, aunque la acción se desarrolla en Las Vegas, para que la producción no se disparase, se rodó en la ciudad de Detroit, filmando gran parte en el Detroit Masonic Temple, lugar donde Scott Spiegel y Bruce Campbell se graduaron en los setenta, y actual estudio donde simultáneamente, Sean Penn y Sigourney Weaver rodaron This Must be the Place y Vamps, respectivamente. El presupuesto modesto de las anteriores entregas no impedía a estas tener una buena factura técnicas al estar rodadas en la República Checa, donde la mano de obra es más barata, pero en Estados Unidos, con un presupuesto mucho más pequeño y sin contar con una segunda unidad, Spiegel tuvo que apañárselas como pudo para sacar adelante su película. Y vaya si lo consiguió. En esta entrega no hay cameos de Takashi Miike, ni hay tanto gore, pero Spiegel la aleja de la estética de telefilm a la que su presupuesto podría haberle abocado, y la convierte en una digna secuela de las anteriores, llegando incluso a superarlas.

Una vez expuesto todo esto, tan sólo nos queda hablar de la misteriosa Spring Break'83, producción maldita que rinde homenaje a las comedias con universitarios de los ochenta, muy al estilo de “Los albóndigas en remojo” (Up the creek, Robert Butler, 1984), cuyo estreno parece atrasarse durante años por motivos de financiación. Según parece, la película pudo comenzarse a rodar en 2008 y en 2009 se estrenó en el Festival de Sundance un trailer para captar algo de financiación. También existen ciertas rumores que desvinculan a Spiegel del proyecto y apuntan al actor, guionista y director, Mars Callahan, como el verdadero realizador del film. Si tenemos en cuenta la cantidad de problemas económicos por los que ha pasado, puede que efectivamente Spiegel haya terminado abandonando el proyecto. Aún así, en la página web de la productora Big Sky Motion Pictures, Spiegel sigue acreditado como director (7), mientras que en las fotografías del rodaje no lo vemos por ningún lado y Mars Callahan si aparece en ellas (y en un lugar preferente: detrás de las cámaras) (8). Aunque por ahí ronda un interesante trailer, habrá que esperar a ver Spring Break'83 para saber cuanto de Spiegel hay en ella. 

(1) Que también venía de un corto homónimo rodado en 1980, Stryker’s War.
(2) Y Tarantino conoció a Siegel por mediación de Sheldon Lettich, director y guionista de varias de las películas de Jean-Claude Van Damme.
(3) Tarantino era un gran fan de la película de Spiegel y escribió el guión sabiendo las limitaciones que, debido al presupuesto, podría tener a la hora de rodar en el futuro. Es decir, si “Intruso en la noche” se recreaba íntegramente en un súpermercado, “Reservoir Dogs” desarrollaría gran parte de la trama en un escenario: un almacén abandonado.
(4) Aunque aquí en España si se estrenó en cines.
(5) Aunque Tarantino ejercía de productor y presentaba la cinta, según dijo en la entrevista que recoge la edición en DVD, la idea de contratar a Spiegel fue de los Wenstein.
(6) La película tendría muy poco que ver con el personaje creado por O’Donell, y sería una cinta de espías al estilo de James Bond o la psicodélica “Diabolik”.

FILMOGRAFIA SELECCIONADA

CORTOMETRAJES

Inspector Klutz Saves the Day (1969) – director. Pies and guys (Bill Ward, S. Spiegel, 1971) – director. Oedipus Rex (Josh Becker, 1972) – actor. A night in the Sanatorium (Bill Ward, S. Spiegel, 1973) – director, actor. Three Smart Saps (B.W, S. S., 1973) – director, actor. Loose Loot (B. W., S. S., 1973) – director, actor. For crimin out loud (S. Spiegel, Bill Ward, 1973) – director, actor. Piece of mind (B. W., S. S., 1973) – director, actor. Booby Bartenders (B. W., S. S., 1974) – director, actor. Three on a couch (Bruce Campbell & S. Spiegel) – director, actor. Three pests in a mess (B. W., S. S., 1974) – director, actor. Half-wits Holiday (1974) (versión del film de los Three Stooges) –director, actor. Curse of the werewolf (1974) – guionista, actor, director. Manhunt (Bruce Campbell, 1974) – actor. All the Worlds a Stooge (1974) – director, actor. No Doughboys (1974) – director, actor. The singing nuts (1974) – director, actor. I’ll never heil again (B. C., S. S., 1975) – director, actor. The great bogus monkey pignuts swindle (Sam Raimi, 1975) – actor. The James R. Hoffa Story (B. C., S. S., ¿Sam Raimi?, 1975) – director, guionista, actor. The James R. Hoffa Story, Part II (aka Home sweet homicide) (S. R., S. S., 1976) – director, guionista, actor. James Bombed: Here today, gun tomorrow (1976)actor, director Attack of the Pillsbury Doughboy (S.S., S. R., 1976) – director. Uncivil War Birds (S. Raimi, 1976) – actor. Mystery no mystery (S.S., S.R., 1976) – director, actor. The case of the Topanga Pearl (J. Becker, 1976) – actor. Picnic (S.R., S.S., 1977) – director, actor. Charlie’s Angels (S.R., S.S., 1977) – director, actor. The kids film (S. S., S. R., 1977) – director. Six month to live (S. Raimi, S. Spiegel, 1977) – director, guionista, actor. The Happy Velley Kid (Sam Raimi, 1977) – actor. Civil War Part II (S. Raimi, 1977) – actor. The final round (J. Becker, 1977) – actor. Acting and reacting (J. B., 1978) – actor. Shem eats the moon (John Cameron, 1978) – actor. It’s Murder! (Sam Raimi,1978) – guionista, productor, actor. Attack of the helping hand (1979) – guionista, director, productor. Clockwork (Sam Raimi, 1979) – actor. Night crew (1979) – director, guionista. Within the woods (Sam Raimi, 1979) – actor. Spring Cleaning (B. Campbell, 1979) – actor. The Blind Waiter (J. B., S. S., 1980) – director, actor. Stryker’s war (Josh Becker, 1980) – actor. Torro, Torro, Torro! (J. B. & S. S., 1980) – director, guionista, actor. Cleveland Smith: Bounty Hunter (J. B., S. S., 1982) – guionista, productor, actor, director (sin acreditar). The Sappy Sap (S. Raimi, 1985) – actor. Facing the lion (Joseph Plonsky, 2010) – editor, productor.

LARGOMETRAJES

“Ola de crímenes, ola de risas” (Crimewave a.k.a. The XYZ Murders, Sam Raimi, 1985) – guionista (sin acreditar), ayudante de casting.
“Vietnam U.S.A.” (Stryker’s war a.k.a. Thou Shalt not Kill… Except, Josh Becker, 1985) – guionista, productor, director de arte, actor.
“Intruso en la noche” (Intruder, 1989) – guionista, director, actor.
“Mondo Zombie” (The Dead Next Door, J. R. Bookwalter, 1989) – actor.
Robot Ninja (J. R. Bookwalter, 1989) – actor.
“De profesión asesino” (Hit list, William Lustig, 1989) – guionista (sin acreditar).
Skinned Alive (Jon Killough, 1990) – actor.
“El principiante” (The Rookie, Clint Eastwood, 1990) – guionista.
“Darkman” (Sam Raimi, 1990) – actor.
The Nutty House a.k.a. The Nutty Nut (Adam Rifkin, 1992) – guionista (sin acreditar).
Nude Bowling Party (J. L. Williams, 1995) – actor.
“Rápida y mortal” (The Quick and the Dead, Sam Raimi, 1995) – actor.
“Abierto hasta el amanecer 2: Texas blood Money” (From Dusk Till Dawn: Texas Blood Money, 1999) - guionista, director, actor.
“Spider-man” (Sam Raimi, 2002) – actor.
“Mi nombre es Modesty: una aventura de Modesty Blaise” (My name is Modesty: A Modesty Blaise Adventure, 2004) – director.
“Spider-man 2” (Sam Raimi, 2004) – actor.
“2001 Maniacos” (2001 Maniacs, Tim Sullivan, 2005) – productor, director de la segunda unidad, actor.
“Hostel” (Eli Roth, 2005) – productor.
“Hostel, Parte II” (Eli Roth, 2007) – productor.
Babysitter wanted (Jonas Barnes, Michael Manasseri, 2008) – actor.
“Arrastrame al infierno” (Drag me to the hell, Sam Raimi, 2009) – actor.
“Hostel, Parte III” (2011) – director, productor.
Spring Break’83 (Pendiente de estreno) – director (¿?).

2 comentarios:

miquel zueras dijo...

Te felicito, Lazoworks. Un excelente e interesatísimo post sobre Spiegel, un director que no ha tenido la suerte de un Tarantino o un Raimi. En todo caso un director a reivindicar. Saludos. Borgo.

Lazoworks dijo...

Se agradece el comentario Miquel!